Voté por ti durante las últimas dos elecciones. Frente a la derecha neoliberal, los intereses mineros y la corrupción de Keiko la única alternativa decente eras tú. El polo popular se había aglomerado alrededor de tu figura y parecían abrirse nuevos horizontes para un país con inclusión, manida y estúpida palabra a partir de hoy. Estuve atento a tu juramentación y me pareció interesante aquel primer gabinete de Lerner. Un equipo de concertación tenía que buscar una nueva forma de gobernar con ponderación y negociando un proyecto político y económico diferente.
La primera piedra fue Chehade. El abogado de Humala y segundo vicepresidente de la republica fue descubierto en negras conversaciones con los mandos policiales para favorecer al grupo Wong. Mal síntoma. El primer mandatario no sabia escoger a su gente de confianza. Enseguida Tapia fue defenestrado por orden directa de Palacio de Gobierno. Humala echaba al tacho sus antiguas alianzas con la izquierda crítica que pedía el estricto cumplimiento de la hoja de ruta y una nueva manera de enfrentar las protestas sociales embalsadas
Luego el inexperto presidente dijo sí a la Conga, sin abrirse a la negociación. Turbios intereses mineros, agazapados en algunos ministerios (y a través de sombrías figuras del gobierno: Adrián Villafuerte, Favre, Oscar Valdez Dancuart) tomaron el gobierno por asalto y secuestraron el frágil carácter del presidente. Aquel Sí a la Conga fue el Rubicón que el torpe Humala atravesó sin darse cuenta, desoyendo la voz de Nadine. El siguiente paso de la derecha fue pedir represión. Salomón Lerner decidió negociar, pero la intemperancia de Patria Roja y las presiones de los asesores en las sombras de Humala decidieron declarar el estado de emergencia, militarizar el conflicto en Cajamarca y mostrar los dientes de la represión en Cañete. A mi me tinca que los servicios de inteligencia estuvieron allí de azuzadores.
Adrián Villafuerte es ahora el nuevo Montesinos. Este portapliegos de Saucedo, y fujimorista encubierto controla en la práctica los resortes del poder ante un presidente pusilánime y sin reflejos. Villafuerte ha dinamitado la política de alianzas que llevó al poder a Ollanta y lo ha aislado de sus bases. Ante ello solo le quedará huir hacia delante y entregarse a las fuerzas que lo denigraron y que fueron las grandes derrotadas de las elecciones de junio. Algo parecido le pasó a Lucio Gutiérrez en el 2006 en Ecuador y terminó derrocado pocos meses después.
Las cartas estan echadas. Hasta Alejandro Toledo ha tenido que ponerse a buen recaudo y retirarse del gobierno y hoy Humala tiene problemas para recomponer el gabinete. La gente decente no acepta carteras pues el gobierno de Humala huele a traición a los principios originales. Algo parecido hizo Fujimori y todo terminó con el autogolpe. No dejemos que esto vuelva a suceder. Salgamos a las calles, a los medios y a las redes. Queremos la cabeza de Adrián Villafuerte.
El camino hacia la NUEVA SOCIEDAD, está empedrado de infiernos. No será nada fácil tener el poder y cambiarlo todo, en medio de un mar de tiburones que solo quieren perpetuar el capitalismo salvaje en que vivimos.
ResponderEliminarSi Ollanta no responde a las necesidades del pueblo que lo eligió y no es capaz de enfrentarse al poder de las derechas; entonces habrá que prepararse para el 2016 y elegir un gobierno realmente de izquierda que inicie la transformación. Bien por esta carta que expresa el sentir de un pueblo conciente.
Desde Lima, Perú
Juve N
Excelente!!!
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